En dos meses cumplirá 70
años, pero su vitalidad y su pasión por el trabajo y la cocina le han
ayudado a escribir catorce libros y estar trabajando ya en el siguiente. El
último ha sido 'Cocina para torpes'. Las distinciones que ha recibido y los
múltiples premios que respaldan sus libros hacen que su cocina haya llegado
hasta los paladares parisinos, donde le han distinguido con algún galardón.
Nació
en Cervera del Río Alhama, pero la vida la ha llevado a Navarra, aunque se
niega a renunciar a sus raíces y destaca la cocina riojana porque asegura
que es "cosa que levanta la boina". Pero de Angelita Alfaro también son
conocidas su alpargatas, de las cuáles guarda un par la princesa Aiko de
Japón.
- ¿Cuándo deja Cervera del
Río Alhama?
- A los 7 años me fui a Tudela. Siempre he
sido muy trabajadora, los domingos acudía a casa de los enfermos a cantarles
coplas de Sara Montiel y a los 11 años repartía pescado los domingos y por
la tarde era canguro de varios niños. Además, tejía y después me iba a
servir a las casas. A los 17 años ya me vine a Pamplona y me puse a servir
de cocinera y a las 21 años me casé.
- ¿Y quién le enseñó a
cocinar?
- En Cervera había un señor que se llamaba
Gumersindo y le llamaban 'El Misindo' y yo me fijaba en sus salsas, de hecho
cuando tenía 11 años escribí la receta de la salsa de perdiz. Y también
aprendí de mi madre que por la mañana era cocinera de los comedores
escolares y por la tarde era alpargatera. Y yo lo que hice fui copiar en
todo a mi madre, que ha sido lo más maravilloso que he tenido en la vida.
- ¿Cuándo decide lanzarse
a escribir su primer libro?
- Mi tía Martina me dijo que por qué no
escribía un libro sobre mis recetas y mi madre le dijo: "no digas eso a mi
hija, que es capaz de hacerlo". Y llamé a una editorial de San Sebastián y
les enseñé mis 435 recetas y así formé mi primer libro de cocina, 'La cocina
de Angelita', del que se hicieron más de ocho ediciones. Yo cuando hice el
libro pedí tres deseos: me gustaría ver la segunda edición de este libro, me
gustaría tener una vajilla con mi nombre y terminar todo el hilo de hacer
alpargatas que tengo. El primer deseo me lo permitió el señor corregido y
aumentado, el segundo también y fue mi hijo el que me hizo un dibujo de un
fogón y me puso 'la cocina de Angelita'; y el tercer deseo no me lo ha
concedido porque no podría terminar todo el hilo ni aunque viviera 200 años.
- Ha recibido numerosas
distinciones...
- Sí, me han nombrado Cofrade del espárrago
de Navarra, del pimiento del piquillo de Lodosa, de la alubia de Tolosa, del
aceite de oliva de Navarra, del relleno de Villava, del Cuto Divino de
Tafalla... Y una de las mayores satisfacciones que he tenido en la vida es
que me nombraran Riojana Ilustre del siglo XX junto con Pepe Blanco, el
cardenal Somalo... Casi se me sale el corazón por la boca cuando vi mi
fotografía en la Catedral de Calahorra junto a ellos.
- También le gusta la
poesía...
- Me gusta mucho la poesía y me encantan las
verduras y he llegado a crear una poesía de la alcachofa. Además, en
Calahorra sois los reyes de la verdura de La Rioja porque tenéis un paraíso
allí. Yo no sé de qué están hechas las coliflores de esa tierra, pero no hay
ninguna que sepa como la de Calahorra. Yo no reniego de mis orígenes. Hubo
un alcalde de Logroño queme dijo que yo era una frondosa cepa riojana que
había dado sus frutos en Navarra.
- Ya ha escrito 14 libros,
¿cuáles han tenido más éxito?
- El libro 'La dieta de la vida' fue
premiado en París como el 'Mejor libro internacional de dieta y salud'. Es
un libro maravilloso, que me lo pidieron los médicos del Hospital de Navarra
y es una joya gastronómica. Para mí supuso mucho ir a París a recoger un
premio reconocido mundialmente y hoy ya cuento con siete de estos
reconocimientos. Y este año el libro que presenté en el Museo Thyssen de
Madrid 'Sabores y emociones. Verduras de Navarra', ya me lo han premiado al
Mejor libro de España por sus recetas tan sencillas y escuetas. Cuando me
recibieron el Día de La Rioja los príncipes de España en el Baluarte le
pregunté a doña Letizia si no le parecía que las fotografías de mi libro
eran demasiado impresionantes en relación con los textos tan escuetos y ella
me dijo: "ahí está la grandeza de las cosas, en saber comprimirlas para
poder ejecutarlas". Y ahí tuvo razón doña Letizia y le escribiré algún día
para decirle que me premiaron por el texto. Además, en la presentación de
este libro también conté con el apoyo de la Baronesa Thyssen y la princesa
Beatriz de Orleans.
- También ha colaborado en
programas de televisión...
- Sí, hace dos años que grabé el programa
'De cuchara' para Canal Cocina y después hice un libro que se llamó 'De
cuchara y tenedor'. En ese programa hice borrajas con cocochas, un cardo con
foie, una ensalada de cardo rojo con carabineros... Es que la cocina es mi
vida. Y a los quince días me llevaron junto con Julius, otro cocinero de
Canal Cocina, para grabar el spot publicitario del décimo aniversario de
Canal Cocina. Y en las navidades de 2009 estuve grabando dulces navideños y
también he acudido al Canal 13 para contar mi historia. En cuanto me dan
pie, yo me explayo. Siempre digo que yo escuela poca, comida también poca
porque estábamos en la postguerra, pero cariño a raudales.
- ¿Cuál es el menú
perfecto de Angelita Alfaro?
- De primero unas patatas a la riojana y de
segundo las patas de cordero de leche en salsita verde y las chuletillas de
cordero para los días de lujo, que esto ya es "cosa que levanta la boina". Y
lo que no puede faltar es nuestro vino de Rioja, que yo siempre digo a mis
amigos navarros que ni me lo toquen. Y de postre los fardelejos, que son una
delicia, y también los canutillos.
- ¿Existe algún plato que
se le resista?
- Lo que se me resiste un poco es el
emplatado, no sé hacer todo esto. He aprendido muchísimo, pero eso no me
preocupa, lo que realmente me preocupa es el sabor del plato, aunque sí que
trato de colocarlos bien.
- Además de su cocina,
también son muy conocidas las alpargatas de Angelita Alfaro.
- Sí, han dado la vuelta al mundo. Cuando
nació la princesita Aiko de Japón yo le hice unas alpargatas y los japoneses
me contestaron dándome las gracias. La que no me ha contestado es Eileen
Collins porque mi bordadora en lugar de bordarle "Eileen Collins, comandante
del Discovery", ella le puso "San Fermín, comandante del Discovery" y yo
siempre digo: "mira le habrán llamado a San Fermín de todo menos
comandante".
- Y ahora, ¿tiene algún
otro proyecto en mente?
- Estoy terminando el decimoquinto libro y
desde la Editorial Anaya ya me han dicho que lo quieren porque dicen que un
libro no sólo hay que hacerlo, sino representarlo y a mi los medios de
comunicación me gustan mucho. Yo siempre digo que cuando me reencarne voy a
ser periodista y presentadora de televisión.
Para finalizar Angelita
Alfaro solicita incluir una poesía en honor a la mujer de Cervera,
su localidad natal, que reproducimos a continuación.
CANTO DE
UNA ALPARGATERA
A SU PUEBLO, QUE ES CERVERA
Quiero cantarle a mi
pueblo,
Quiero cantarle a
Cervera
Porque allí mi buena
madre
Me trajo a la luz
primera
Por querer tanto a Santa
Ana
Y por ser alpargatera
Junto a mi otra gran
pasión
Que es la de ser
cocinera.
Alpargatera que sabes
De madrugadas sombrías
De trasnochadas cansadas
Tantos años, tantos días
Para entregar el trabajo
que siempre prisa corría
Y cobrando una miseria
que ni para pan cundía
Y que lo necesitabas
para sacar la familia.
Es un gozo este trabajo,
Que lo mamaste de niña
Y lo elaboras soñando
Que la perfección
consiga
Hasta ver que así has
logrado
verdaderas maravillas
Con una aguja muy chica
y con una zapatilla
Calzarás a un pordiosero
y hasta la soberanía
Es para mí un gran
orgullo
haber calzado dos Papas,
A gente de medio mundo
y a los humildes de
Chiapas.
Más siento pena que aquí
sea un quehacer no
apreciado
Por eso quiero al morir
dejarles este legado
De quien se siente feliz
y honrada con su
trabajo. |