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   AUSTRALIA - SOCIEDAD -    -

Jorge. Electricista en Australia.


Jorge es un joven de Zaragoza que un buen día decidió darle la vuelta a su vida. La idea de cambiar y buscar una vida mejor le llevó, nunca mejor dicho, a la otra punta del globo, a Australia. Jorge dice que pasó de la noche al día, de la tristeza a la esperanza.


AUSTRALIA

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Aquí está todo por hacer es un país inmenso y muy poco poblado

Aquí todo es gigantesco las distancias, la comida, la bebida incluso las personas son grandes.

El paisaje aquí es espectacular, hasta el desierto es bonito

Las fincas son enormes. Los rebaños son inmensos. Las granjas utilizan helicópteros para pastorear los rebaños


- ¿Cómo se le ocurre ir hasta Australia?

- No se me ocurrió pero la oportunidad se puso delante por sí sola.

- ¿Por qué allí?

- Bueno fue una unión de circunstancias que no es fácil explicar. Pero resumiendo diré que en un momento dado, como tantos otros, me quedé sin trabajo.

- ¿En qué trabajaba?

- En una empresa de mantenimiento eléctrico. La empresa se dedicaba a mantenimiento y también a instalaciones eléctricas. Hacíamos la instalación en obra nueva de naves industriales, pisos... en lo que fuera. Pero vino la crisis y acabamos la mayoría en la calle.

- ¿Cuándo ocurrió esto?

- Creo que era sobre el 2007, la gente habla de la crisis como si hubiese ocurrido en España de repente pero la cosa se veía venir desde hacía tiempo. Pasamos de hacer naves y edificios a atender las marías.

- ¿A las Marías?

- Si en el argot es atender llamadas de arreglos a domicilios, no lo he inventado yo es así como se expresaba a nivel del currela. El caso es que la cosa fue decayendo a pesar de que nuestro jefe hizo lo indecible, pero ya al final incluso le dio un ataque y aquello precipitó todo. Bueno que cerró y me vi en la calle.

- Como tanta gente.

- Sí pero eso no es precisamente un consuelo, la gente ve el telediario pero hasta que la cosa no te toca a tí no te das cuenta de lo que es. Yo vivía con mis padres y tuve que volver a pedirles la paga. Empezaba a pensar en comprarme un piso, entonces tenía pareja, pero todo se detuvo. Tiempo después también la relación se rompió.

- ¿Y cómo surge lo de Australia?

- No fue tan rápido. Digamos que caí en un agujero mental. Varios de mis amigos también acabaron en el paro. La cosa se puso fea y el desánimo me pudo. Un día un amigo de mi hermano que estaba estudiando en Australia le comentó de pasada que había una oferta de trabajo para un electricista mi hermano me lo comentó entre risas pero para mí fue una luz que se encendió. Le pedí el email del amigo y le escribí, al principio se lo tomó a chunga pero le envié el currículum inmediatamente. El trabajo era para el mantenimiento en un colegio. Aquí sólo entras con un contrato de trabajo y suele llevar meses pero no sé por qué en mi caso fue todo muy rápido.

- ¿Hablaba inglés?

- Poquísimo, cuatro palabras.

- Vamos a ver en el currículum pondría su nivel de inglés.

- Digamos que la sinceridad en ese aspecto fue un poco poética. Aunque cuando vi que la cosa prosperaba empecé a currarme un cursillo por internet. Sí "me lancé a la piscina". Estaba tan agobiado que me daba igual si no había agua.

- Y en casa qué le dijeron.

- En principio estado de shok, imagínate mi madre, somos tres hermanos y todavía en casa. Pero como iba a trabajar y había posibilidades de contactos por el amigo de mi hermano no pusieron pegas. Tiempo después mis padres me dijeron que me veían tan mal tan desanimado que al verme con esa ilusión les pareció bien.

- Y cómo es la vida en las antípodas.

- Bueno, para empezar no son exactamente las antípodas, creo que las antípodas de España es Nueva Zelanda (Lo dice en inglés "niusiilan").

- Hey vaya nivel de inglés.

- Je, je si al final se te queda todo. El problema con el inglés es que es tan suave que no pillas las entonaciones. El español aquí también les suena como si estuviésemos siempre cabreados. Y eso que el inglés aquí respecto al inglés de Inglaterra es bastante tosco. Al principio el idioma me costó muchísimo, pero tuve que espabilar le eché cara como nunca antes. Lo primero que aprendí fue "please speak slow". Entre eso y el lenguaje por señas fui saliendo. Por otra parte tuve suerte ya que fui a trabajar a un colegio y tuvieron mucha paciencia conmigo. También es cierto que esta es una tierra mayoritariamente de emigrantes y es necesario entenderse unos con otros y poner todos de nuestra parte.

- ¿El trabajo es complicado?

- Es un trabajo de mantenimiento como el que se pueda dar en un colegio de España. Lo más complicado por así decirlo es el tema eléctrico y yo ahí me muevo sin problemas, por así decirlo, la electricidad es un lenguaje internacional. Luego si hay que hacer algún trabajo de albañilería o fontanería sencillo no hay más que aplicar el sentido común. Esta semana por ejemplo he reparado una gotera. Levanté unas tejas hice una foto con el móvil y la llevé al almacén donde compramos el material. Ellos mismos me dijeron como poner una parche con un cemento especial. Fin del problema.

- ¿Conoce a más españoles allí?

- Aparte del amigo de mi hermano, que ya volvió a España, casi no.

- ¿Se encuentra a gusto? ¿Se arrepiente?

- Me arrepiento, sí, pero de no haber venido antes.

- ¿Cómo?

- Esto es una maravilla. La gente es genial, el paisaje es increíble. Vivo a 200 kilómetros de Sidney. Una distancia que para ellos es mínima. El coche hace falta para todo. Aquí todo es gigantesco las distancias, la comida, la bebida incluso las personas son grandes. El paisaje es increíble (creo que ya lo he dicho). Luego su mentalidad es muy diferente. Aquí está todo por hacer es un país inmenso y muy poco poblado. La mayor parte de la gente vive en las ciudades y cerca del mar. Me encanta viajar al interior, hacer excursiones por la costa. El paisaje aquí es espectacular, hasta el desierto es bonito. Recuerdo que uno de los primeros amaneceres que vi en la costa casi me hizo llorar. Esto es el paraíso.

- ¿Y la gente?

- Anglosajones. Muy muy educados. Creo que en todos estos años no he visto apenas discusiones, pero es que ni en sábado por la noche y eso que tienen fama de juerguistas. Incluso conduciendo, no abusan del claxon, no insultan y te lo digo por propia experiencia porque eso de conducir por la izquierda... No me acostumbro incluso hoy en día hay ocasiones en las que tiendo a circular por la derecha. Volviendo a la educación incluso en el colegio en el que trabajo, que es para chavales de infantil, cuando salen al recreo apenas gritan y son muy respetuosos entre ellos. Aquí los niños son más de hablar que de pelearse o jugar.

- Es un país de futuro.

- Esto es enorme. Es difícil hacerse una idea. Por ejemplo hay mucha ganadería. Las fincas son enormes. Los rebaños son inmensos. Las granjas utilizan helicópteros para pastorear los rebaños, suena a broma pero es así.

- Alguna pega habrá.

- Es una tierra para espíritus aventureros. Cuando hace calor, siempre hace calor, es asfixiante. Incluso los niños en el colegio cuando salen no les dejan al sol. Sus momentos de esparcimiento son bajo techo. Cuando llueve hay corrimientos de tierra y llueve torrencialmente. La naturaleza aquí te hace pequeño y la tienes que asumir con humildad.

- Y las relaciones interpersonales. Entiéndase ¿Se liga en Australia?

- Sorprendentemente aquí me ha resultado más fácil relacionarme que en España. España tiene fama de ser un país muy abierto, pero yo aquí me he relacionado muy bien con las chicas y he hecho amigos. Las chicas son muy naturales. No he visto quizás tanto recelo como es España. La verdad es que ahora pienso en España y en general me vienen recuerdos de tristeza, negatividad, enfados... la sociedad en España está muy mal, pero que muy mal veo la tele en internet y la verdad no sé en qué va a acabar esto.

- Alguna diferencia sustancial.

- Pues después de tantos años el otro día tomé consciencia viendo en la tele al papa Bergoglio, que aquí hay mucho católico pero la iglesia apenas aparece en los medios de comunicación, bueno ni la católica ni ninguna otra. Al menos a mí me lo parece.

- ¿Qué echa de menos?

- La familia, algún amiguete. La comida. Poco más.

- ¿Piensa en volver a España?

- De vacaciones.

- ¿Y en volver a España definitivamente?

- No.


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